Tengo una vecina que escucha a Arjona y unos giles del piso de arriba que escuchan a Joe Vasconcellos y más encima se ponen a cantar. Me subo a un taxi o colectivo y el chofer va escuchando a Américo o La Noche. Espero el metro en cualquier estación y cuatro pantallas gigantes me pasan videos de alguna estrella pop del momento; alguna canción inofensiva que nadie pidió escuchar. Por suerte existe el underground, por suerte existe el metal y la música experimental, por suerte podemos decidir y optar por caminos musicales donde los intereses comerciales no son lo más importante. Menos mal que existe la opción de buscar música por debajo de la hipocrecía de este detestable mundo mainstream. Mainstream, la corriente principal, ¡aquella por donde transitan las ovejas del sistema! Y desde aquí pegamos nuestro grito de disconformidad: Fuckin' Underground Forever! Y sí, quizás nos puedan gustar un par de cosas del mainstream, ¡pero nuestros corazones están y seguirán estando en el lado oscuro de la fuerza!